CASOS DE VIDA

Casos de vida – La decisión

“Porque hay cosas que simplemente no se pueden reparar” fue la última frase que escuché antes de retirarme de la funeraria. Me indigné y me retire de ese refugio de paz, pero no sería el ambiente en donde tomaría la decisión que me definiría como persona de aquí en adelante. Decidí caminar a casa, aunque ya estaba demasiado lejos como para cualquier persona juiciosa, pero eso no tenía relevancia para mi, así que preferí por seguir derecho por la avenida central del pueblo hasta llegar a algún terminal de buses acompañado solamente del sonido de mis pasos, como si ese sonido fuese el metrónomo de mi futuro próximo y el ritmo de mis pensamientos actuales. El camino al frente mío se difumino con mi caminar y lo que en un principio era una ruta a casa se convirtió lentamente en una ruta en búsqueda de respuestas, por lo que comencé a pensar en mis compañeros de caminata y cómo cada uno de ellos ya no estaba conmigo, fuese por decisión propia o por decisión del destino y como siempre tardíamente me daba cuenta de su ausencia, por lo que mi única pregunta que albergaba mi cabeza era ¿por qué ahora ellos caminan sin mí, si yo fui quien les enseñó a caminar?, pero de algún modo un pedazo de mi inconsciente me respondía ¿acaso ellos no te enseñaron nada o tú no quisiste aprender de ellos?, fue ahí donde donde el silencio de la calle inundó mis oídos y mis ideas. (más…)

Casos de vida – Visita inesperada

Acá el tiempo pasa sin muchos contratiempos, somos una familia pequeña ya que solo somos mi padre y yo y nos esforzamos todos los días para ser lo más felices posibles desde que mi madre nos dejó y se fue a un lugar mejor, ella la mujer mas increíble que yo pude haber conocido en mi vida, fue una mujer que amó toda su vida a mi padre y que cuido de mi como si fuera su hijo biológico. Así es, yo soy un joven rescatado por esta hermosa familia de dos personas y que ahora de grande no sabe más que agradecerles por todo el amor que me brindaron de vuelta, lamentablemente el tiempo no estuvo  de mi parte y no pude retribuir a mi madre todo lo que ella me dio, por lo que con mi padre hicimos una promesa en honor a ella, la cual sería nuestra razón de vida  desde ese día en adelante, todo ese amor que no pudimos darle a este ángel guardián que nos cuido lo entregaremos a quien más lo necesite. No iniciamos ninguna fundación, ninguna entidad de caridad, sino que más bien cambiamos nuestra actitud de vida hacia los demás. (más…)